A veces cuesta recordar que no siempre tienen la misma estructura gramatical, por ejemplo poner el posesivo detrás del nombre, o usar unas preposiciones a la que no estamos acostumbrados.
Creo que la palabra casa es una excepción... no puedes decir "a mia casa". La verdad puedes decir "nella mia casa", pero pareciera como si estuvieras hablando de una casa diferente de la donde vives.